Chicos que molestan
Hace muchos años que un maestro me dijo que con los chavales difíciles son necesarias por nuestra parte «sangre, sudor y lágrimas». Sorprendido por aquella aseveración, pregunté si no debería ser al revés. En absoluto, contestó, somos nosotros los educadores quienes tenemos que hacer el esfuerzo de entender, comprender y educar a esos chavales (junto a sus…