Escucho en El suplemento, un fantástico programa de reportajes de Radio 1 (RNE) que se emite a diario a las 20.00 horas, que la mitad de los estudiantes de Bachillerato manifiestan ansiedad cuando no tienen en sus manos el móvil. ¡¡¡La mitad de los estudiantes!!!
El Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, en un estudio realizado en el pasado 2005, establece la cifra el el 38%. ¡Ahora entiendo lo que les supone que les confisquemos el móvil en el Instituto si lo encienden dentro del aula! El móvil lo usan principalmente para enviar mensajes y jugar, relegando al último lugar la realización de llamadas.
El tema de los mensajes SMS tiene su miga: han creado su propio lenguaje con abreviaturas y emoticones; utilizan las llamadas perdidas como un medio más de comunicación y encuentro… está claro que es un referente cultural y, dicen los expertos, que cuando pase más tiempo se normalizará el uso del móvil como si de un electrodoméstico más se tratara. Ya veremos.
Por lo pronto, para que nos enteremos, podemos consultar el primer diccionario SMS AQUÍ
Por otra parte, más allá de las valoraciones, ésta es la realidad que tenemos delante: nuestros adolescentes y jóvenes utilizan las nuevas tecnologías para sus propios fines, especialmente el ocio, y es la primera vez en la historia que éstos son los que ayudan a los mayores a utilizarlas, de modo que es frecuente que nos enseñen a usar los móviles, los ordenadores, los reproductores de DVD, las consolas…
Nuestros chavales están inmersos en la era de las nuevas tecnologías, es su medio, esto no es valorable como negativo por el hecho de contraponer las viejas a las nuevas tecnologías, no es un paso atrás, ni mucho menos, es el signo de estos tiempos a los que, por cierto, muchos profes accedemos a trancas y barrancas. Por eso, debemos aprovechar tanto el enorme potencial de las TIC como la enorme facilidad que tienen los chavales para utilizarlas.
Artículo del Defensor del Menor AQUÍ
Imagen: FlickrCC